Estrategias anti-felinos: ojos en el culo

hindúes con careta anti-tigreUna tradición hindú cuenta que los tigres jamás atacan a un humano de frente, y por ello algunos pobladores de los Sundarbans y otras zonas con población de estos felinos suelen llevar una careta de cartón o madera al revés, es decir, en la nuca. Por tonto que esto parezca, es cierto que en el reino animal abundan los ejemplos de caras y ojos falsos que aterran a los depredadores (por ejemplo polillas cuyas alas parecen la cara de un búho u orugas que reproducen una cabeza de serpiente en la parte trasera). También imagino que, según el tigre y el hambre que tenga, alguno habrá que ataque de frente; pero si con eso evitan el 80% de los ataques, mira, bienvenida sea la careta.

En África no hay tigres pero tienen leones. Dada la cada vez mayor extensión de las poblaciones humanas en territorio antes virgen, es normal que ambos animales interactúen con consecuencias feas. Los leones atacan, más que a los humanos, al ganado -más fácil de capturar que sus presas naturales- lo que provoca pérdidas muy importantes en unas aldeas ya de por sí pobres.

¿Cómo puede protegerse un granjero de un área rural, cuyo ganado pernocta en unas empalizadas hechas con zarzas, de estos ataques furtivos? Construir corrales de chapa u hormigón está fuera de lugar. Los leones, por su parte, están protegidos como especie: si ya aquí en Europa, con más medios, es difícil proteger los rebaños de ovejas de los ataques de lobos y al mismo tiempo proteger al lobo, en países como Botswana no te digo nada. Pero una estrategia barata ideada por un biólogo de la Universidad de Nueva Gales del Sur (Australia) podría ayudar a paliar dichos ataques.

vaca con ojos en el culoEstudiando el comportamiento depredador del león, que es un cazador por acecho (es decir, actúa como los gatos: se acerca sigilosamente lo más posible a la presa y ejecuta un ataque fulminante) se dieron cuenta que cuando la presa -digamos un impala- descubre al león, éste se retira. Así que se les ocurrió pintar unos ojos en las nalgas de la vaca, como si fuera una enorme polilla.

El experimento, llevado a cabo en Botswana con la colaboración del Botswana Predator Conservation Trust, tomó en cuenta un rebaño de 62 vacas del cual pintaron a la tercera parte. En los primeros controles estadísticos, todas las vacas con ojos en el culo volvieron sanas y salvas, contra tres bajas de vacas no pintadas. Es un estudio escaso (diez semanas) pero prometedor.

El experimento prosigue, y admite crowdfundinghttps://experiment.com/projects/i-cows-can-intimidating-eye-patterns-painted-onto-cows-reduce-lion-attacks